Sobre los riesgos de exhibir
la intimidad
En la nota La Web desnuda cada vez más los gustospersonales publicada en Clarín, Mariana García anoticia sobre la presencia creciente en nuestro país de empresas que
investigan datos de quienes navegan en el ciberespacio.
La nota parte de señalar que
- La gente piensa que Twitter y Facebook son gratis, pero
uno paga con sus datos, en las
palabras de Daniel Monastersky, abogado y especialista en delitos informáticos.
Horacio
Cairoli, ejecutivo de SocialAd, aporta que con programas especiales, rastrean
en las redes sociales qué es lo que se dice de tal o cual de sus clientes. Y advierte,
- Quienes
nos dedicamos a esto vemos marcas pero también personas. La gente debería tener conciencia del impacto
de lo que hace en las redes sociales.
Uno de
sus clientes, puesto a elegir entre cinco modelos para hacer una campaña
publicitaria, optó por quien tenía mejor reputación online.
Aceptemos que es un
criterio. Y quien decide basándose en la información que le aportan, puede no
tener más herramienta que un único ranking.
Las palabras
de los entrevistados en la nota permiten redondear que nadie sabe dónde irá a
parar la información personal que cada uno genera en Internet.
- Es un
escenario de negocios completamente nuevo, muestra Daniel Dron, director de
Social Media Institute, con dos años dedicándose a capacitar a profesionales para
estudiar la información que genera la masa de personas navegando en Internet.
Exponerse
comenzó siendo un juego Hoy sabemos que es algo más.
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