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¿Qué narra el mito de Sísifo?
Según la mitología griega, Sísifo
fue el rey y el fundador de Corintio. Durante su vida fue, además de un
importante promotor del comercio y de la navegación, un ávaro y
mentiroso que recurrió a toda clase de trucos para enriquecerse a costa
de los demás.
Sin embargo, el recuerdo de su personaje
se debe al castigo que sufrió a mano de los dioses. Con el fin de vivir
eternamente, Sísifo convenció a su esposa para que a su muerte no
oficiase los ritos habituales en ofrenda a los dioses. De este modo,
cuando llegó al inframundo, Sísifo pidió a Hades que le dejara volver un
tiempo a la superficie para castigarla, artimaña que empleó para vivir
en la tierra durante más tiempo del establecido. Finalmente Hermes le
devolvió por la fuerza al inframundo. Allí se le impuso el castigo
eterno de empujar día tras día una pesada piedra hasta lo alto de una
colina, piedra que volvía a caer una vez alcanzada la cima.
El mito de Sísifo ha servido de
inspiración a muchos autores con el fin de ilustrar el sinsentido de la
vida. Por ejemplo Albert Camus, premio Nobel de Literatura en 1957,
recogió en su libro "El mito de Sísifo" una reflexión sobre lo absurdo de la existencia humana.
Finalmente, esta historia también ha
sido de gran importancia en la simbología solar, pues el castigo de
Sísifo se asemeja al comportamiento del Sol, que día tras día surca el
cielo hasta caer en lo más profundo de la noche.
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